Para las marcas, cada día se convierte más importante lograr conectarse y vincularse con los clientes a través de las redes sociales. Ya no es suficiente compartir un enlace interesante, una imagen cualquiera o hacer la típica pregunta cada mañana “¿Cómo amanecen hoy?”
Hoy en día, los usuarios buscan algo diferente, algo que los sorprenda, que los emocione, algo que realmente los “enganche.” Aparte de eso, los usuarios hoy son más inteligentes que antes y tienen más opciones donde elegir. Por eso resulta fundamental que las marcan comiencen a interactuar emocionalmente con sus clientes en las redes sociales. ¿Si las personas lo hacen, por que no las marcas?
John Medina menciona: “Un evento cargado de emociones es el tipo de estímulo externo mejor procesado por nuestra mente. Los acontecimientos cargados con emociones, persisten mucho más tiempo en nuestra memoria y se recuperan con mayor precisión que los recuerdos neutrales. ”
¿Qué les quiere decir esto a las marcas? ¿Cómo pueden aplicar esto en el ámbito de las redes sociales? ¡Muy fácil! Las marcas deben enamorar, inspirar y compartir emociones para ser recordadas por más tiempo. Si hay una emoción insertada en los mensajes que transmiten, estos perdurarán por más tiempo. Comprobado.
Por ésto, las marcas deben crear y compartir contenido emocional. A crear marketing que enamore. A crear algo mas allá que publicidad. A generar experiencias, movimientos, sensaciones. A contar una historia. Solo de esta forma, podrán realmente conectarse con sus clientes. Definitivamente, las marcas no podrán utilizar las redes sociales efectivamente si no capturan las emociones de las personas. El hecho que las marcas transmitan emociones a traves de las redes sociales ya no es un valor añadido, es un requisito.
